La cuarta versión del foro de Derechos Humanos ‘Quindío al Derecho, Quindío por la Paz’, contó con la presencia del magistrado de la Justicia Especial para la Paz -JEP-, Juan Ramón Martínez Vargas, quien resaltó la importancia de este escenario de diálogo auspiciado por la gobernación del Quindío, el cual permite avanzar en la construcción de una paz estable y duradera.
El funcionario de la sección de Reconocimiento y Responsabilidad de la JEP, aseguró que el sistema transicional o cualquier proceso de construcción de justicia como escenario de paz tiene dificultades en su implementación por las profundas heridas que no han cicatrizado aún. “Pensar en reconciliarnos en escenarios de justicia es complicado, no solo en Colombia sino en otras latitudes donde la implementación de un acuerdo como el nuestro ha sido difícil”.
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Dijo que desde la JEP entienden que este ejercicio a mediano plazo tiene una temporalidad muy corta de 15 años para, a través de estos escenarios de justicia, construir paz. “Entendemos también que hoy el país está inmerso en un escenario complejo de conflictos armados como lo ha establecido el Comité Internacional de la Cruz Roja, por eso la mejor forma de llegar a un buen escenario de paz es a través de la justicia”.
La gobernadora encargada del Quindío, Cielo López Gutiérrez, señaló que el Foro de Derechos Humanos este año no fue ajeno al compromiso de proporcionar conferencistas con gran experiencia académica, profesional y social que nutren al público con argumentos y pone en discusión temas como la reconciliación, la construcción de paz, el dialogo y el perdón en los territorios.
Ariel Fernando Ávila Martínez, subdirector de la fundación Paz y Reconciliación señaló que uno de los mayores problemas que enfrenta la implementación de los Acuerdos de La Habana es que las personas se informan sobre el proceso a través de las redes sociales. “Hay muchas mentiras y algunas verdades, lo ideal de estos espacios como este foro de Derechos Humanos es que los ciudadanos se eduquen mejor y se informen mejor”.
Al referirse a temas más coyunturales, como los recientes escándalos de corrupción en las Fuerzas Armadas, Ávila señaló que como en todo caso se debe seguir el debido proceso, pero que se es necesaria mayor celeridad en las investigaciones que se adelantan, puesto que el buen nombre de las fuerzas militares está en juego.
«A raíz de escándalos como el de los falsos positivos, el extravío de los fondos reservados de las Fuerzas Militares y el pago por ascensos, el presidente de la República debería tomar decisiones de fondo y apartar a toda la cúpula militar y al ministro de Defensa, con el objetivo de que la confianza en las Fuerzas Militares no se siga perdiendo».
Agregó que lo que hoy pasa con las Fuerzas Militares es normal en todo proceso de postconflicto, toda vez que terminada la guerra empiezan a aflorar todos los problemas de las instituciones.
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