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El drama de los apicultores quindianos. Sus abejas mueren y ellos han tenido que mudarse a otras regiones

Por culpa de los químicos que se están utilizando en agricultura, miles de abejas están muriendo a diario en el departamento del Quindío. Una tragedia ecológica que el colectivo ‘Abejas vivas’ busca detener a través de un proyecto de ley.

Lo más crítico del asunto es que expertos aseguran que lo que está matando a las abejas nos puede matar a todos, ya que “Si no hay polinizadores no hay comida, lo que representa un problema de seguridad alimentaria para la humanidad».

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Los apicultores han logrado identificar una cifra superior a 15.600 colmenas envenenadas por agroquímicos que se usan para fumigar los cultivos. Es decir un 34% de la población de abejas registrada en el país.

Según los apicultores, los productos atacan el sistema nervioso central de las abejas y mueren por desorientación, las abejas no regresan a su colmena, pierden la memoria.

En los últimos 3 años el 30% de las abejas en Colombia ha muerto a causa de los plaguicidas, lo que ha llevado a la quiebra a varios apicultores.

Es así como desde el Quindío, más exactamente desde el corregimiento de El Caimo en Armenia, el colectivo de apicultores redactó el borrador del primer proyecto de ley para proteger a las abejas, y que será impulsado por el representante a la cámara por Risaralda, Didier Burgos.

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La propuesta busca ponerle lupa al uso de herbicidas que se están usando en cultivos con un mínimo de control.

Mientras el proyecto se vuelve ley, varios apicultores quindianos han tenido qué emigrar para proteger a sus abejas. Algunos han salido a sitios selváticos en los llanos orientales o hacia el sur del país.

La historia de uno de estos apicultores quindianos fue relatada así por Noticias Caracol:

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