Quedarnos en la crítica sin sentido, vacía, aguda y sin argumentos de los mandatarios que ha tenido nuestro Montenegro en estos últimos veinte años, es avalar pensamientos negativos, frustrados y faltantes de construcción moral y social.
En su orden de mandato: Isabela Pava, Octavio Arenas, Gustavo Pava, Luis Alberto Castaño, Eleazar Jiménez, Gloria Inés Gutiérrez, James Cañas, Álvaro Hernández, han tenido aciertos y cada uno de ellos ha dejado algo positivo para el municipio; de la misma manera, debido a sus vanidades de poder o asesorías fuera de tiempo o lugar, todos, sin excepción, han cometido errores o han dejado temas pendientes a los cuales no se les prestó la debida atención; a su favor juega que los recursos no son suficientes y la mal llamada descentralización, se ha convertido para el gobierno nacional, en abandono constante de los territorios y sus comunidades.
Estamos a pocos días de decidir en las urnas, cuál será el próximo alcalde de Montenegro para el cuatrienio 2020-2023, mandatario que deberá tomar acción en tres problemáticas conocidas por todos: Inseguridad, desempleo, deterioro del tejido social; las herramientas existen y las decisiones se deben tomar para que terminen las extorsiones, hurtos, asesinatos y expulsiones del territorio; se deben analizar y crear políticas para que el sector privado genere nuevos puestos de trabajo, dejando la dependencia de los contratos públicos como única fuente de empleo; se debe brindar atención directa a la comunidad con proyectos sociales que atiendan la primera infancia, niñez, adolescencia, juventud y abuelos, beneficiando los distintos grupos poblacionales, integrándolos al desarrollo económico, cultural y deportivo.
Su decisión es la mejor, nadie puede cambiar su voto por dádivas, promesas, presiones; usted como ciudadano debe ejercer su derecho a sufragar, motivado y convencido por la confianza depositada en un ser humano que ha puesto su nombre a consideración de todo un pueblo que vislumbra esperanza y necesita acciones inmediatas para frenar los flagelos de inseguridad, desempleo y deterioro del tejido social.
Es el momento del pensamiento positivo, para decirle a todos los montenegrinos que defiendan sus posiciones e ideales políticos con respeto y altura, luchando siempre por un futuro próspero para las nuevas generaciones.
A pocos días de elegir, para algunos pueden existir dudas de su decisión final; los invito para que estudien los programas de gobierno, conozcan los candidatos, hablen con ellos, aclaren dudas.
Vote por el candidato que le genere confianza. Recuerde que su decisión es la mejor.
Al final, todos queremos un ¡Montenegro para vivirlo!
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