“Si nosotros vendemos chontaduros no es porque queramos, nos toca; ¿Usted cree que donde yo tuviera un trabajo estable, pensión, cesantías y todo al día, ¿yo estaría jodiendo en la calle al sol y al agua? Que los policías me correteen, espacio público, camiones… no, eso es mentira”.
Su nombre es Alfredo Guevara, estudió Ingeniería de Sistemas y Computación durante 4 semestres en la Universidad del Quindío. No pudo culminar por falta de recursos y ahora es vendedor ambulante. Fue justamente en su puesto de chontaduros donde multaron a la primer persona de Armenia por comprar en las calles.
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“La verdad es que ese comparendo nunca se había hecho. Ella tan sólo quería un vasito con chontaduros. No estaba robando. En cambio a los ladrones sí no los joden. Lo que pasó fue un atropello, un maltrato», dijo mientras señalaba los chontaduros y agregaba: “Ésto no es mal habido, nosotros lo compramos, tenemos factura y todo”.
Alfredo explicó además por qué estaba vendiendo en ese sitio: “Nosotros no tenemos un lugar adecuado, nos pusieron en el CAM y allá no hay más que una mano de viciosos, de rateros, la gente no va a comprar allá. Le digo la verdad, yo tengo puesto y soy uno de los primeros, a mí me tocó un buen puesto, pero salí con mucha deuda de allá, demasiada, salí con tres gota a gota, y una pérdida de $700.000, ya no me está dando ni para la comida, para nada”.
Este humilde vendedor es padre, y se rebusca la vida de una manera que parece digna. Lo despidieron de un supermercado en el que trabaja por un despido unilateral y sin pasar ni un día empezó a trabajar en lo que le diera, pensando en su hijo y en su familia. “Es que uno con familia ya el pensar es otro, ya usted con familia su pensar ya no es; ‘yo voy a comer’, si no, ‘va a comer mi familia primero y después yo’”.
En medio de la entrevista se tocó el tema de la política y contó que hace 2 años en la campaña para la alcaldía, el actual alcalde, Carlos Mario Álvarez, les prometió, junto con un concejal, que los iba a ayudar, pero ya luego de convertirse en alcalde, las cosas para los vendedores informales empeoraron.
Hasta el barrio de Alfredo llegan cantidades de políticos en campaña prometiendo cosas y «enredando a la gente», para que voten por ellos. Luego de que son elegidos, «se desaparecen y jamás vuelven».
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Mientras charlaba, señaló que » la secretaria de Gobierno, la señora Gloria Cecilia García, siempre busca el atropello. A ella no le importa nada. Nunca dice ‘vamos a conciliar, vamos a hablar’».
Finalizando la charla expresó una frase concluyente: “Si hubieran más personas que comprendieran la realidad, créame que la situación sería diferente”.
El representante de vendedores ambulantes, David, conocido como ‘Chiqui’, manifestó que la situación del gremio es complicada. Los informales que están en el CAM sienten miedo, pues la policía no hace presencia en el sector y este se ha vuelto supremamente inseguro. «A los habitantes de Armenia les da temor ingresar a la plaza de verduras a comprar, las ventas bajaron mucho, nadie quiere entrar. Estamos abandonados y el alcalde sigue sin contestar el teléfono y continúa sin darles una solución a los más de 120 negocios que hay en ese espacio. Si no hay una pronta respuesta por parte del alcalde, saldremos a las calles de la ciudad a continuar trabajando», sentenció.
Por: Juan Pablo Álzate Sánchez, estudiante de grado décimo en la institución educativa CASD.
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