Jair Andrés Henao Londoño, fue capturado el 22 septiembre de 2018 en el barrio Cruz Roja de Quimbaya, cuando se movilizaba en un vehículo de servicio público y al ver un puesto de control de la Policía, emprendió la huida. Minutos después fue capturado en flagrancia portando un arma de fuego.
Poco tiempo después, y tras conocerse que el sujeto había participado en varios delitos, fue recluido en la cárcel de Cómbita, Boyacá, pero podría quedar en libertad en los próximos días por vencimiento de términos.
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Es por ello que el pasado 20 de enero en el Juzgado cuarto penal municipal con función de control de garantías de Armenia se adelantó audiencia pública de imputación de cargos en la que la Fiscalía sexta especializada solicitó medida de aseguramiento intramural en centro carcelario en contra el detenido.
De acuerdo con el portal periodismoinvestigativo.com.co en la audiencia se le imputaron nuevamente cargos por los delitos de extorsión, homicidio agravado, porte ilegal de armas de fuego, concierto para delinquir agravado, uso de menores de edad para la comisión de delitos, trafico fabricación o porte de estupefacientes y destinación ilícita de muebles o inmuebles.
La investigación
Según la Fiscalía, Henao Londoño habría cometido por la menos 38 homicidios, pero hasta ahora se ha podido recaudar material probatorio del asesinato de 17 personas.
Interceptaciones telefónicas, imágenes, videos, testimonios de testigos, víctimas y hasta de los mismos cómplices, hacen parte del material probatorio con el que cuenta la Fiscalía sexta especializada de Armenia.
El ente investigador ha establecido que hubo por lo menos un asesinato por granada de fragmentación, otros por armas de fuego y uno por arma blanca.
El imputado habría sido el líder de una organización criminal desde 2015, conformada por al menos 25 personas. En esta se se utilizaban menores de edad para sicariar, transportar armas de fuego y drogas prohibidas.
Durante las audiencias se conoció que Jair Andrés Henao Londoño asesinó a una de sus víctimas solo por reírse. Su actitud inhumana lo llevaba a gozar asesinando personas y hasta mataba a sus mismos sicarios para borrar rastros, después de que cumplían algún encargo criminal.
La Fiscalía buscaría un preacuerdo con el sindicado, con la idea de esclarecer más hechos criminales cometidos por él. Aunque no aceptó los nuevos cargos imputados, fue nuevamente afectado con medida de aseguramiento en el mismo centro carcelario de Cómbita.
Con información: periodismoinvestigativo.com.co
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