El reconocido médico que disparó contra sus tres asaltantes y los mató, en un puente peatonal de Bogotá, se entregó a las autoridades.
El profesional además hizo entrega del arma con la que se defendió de los ladrones, y el respectivo salvoconducto de la misma. Los delincuentes muertos conformaban una banda que operaba en la localidad de Usaquén.
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La hipótesis preliminar de las autoridades es que le hecho se trata de un caso de defensa propia, algo que está amparado en el artículo 32, numeral 6, del Código de Procedimiento Penal.
Los tres sujetos muertos además presentaban antecedentes judiciales. La misma alcaldesa de la capital de la República señaló que está dispuesta a prestar asesoría jurídica al ciudadano que se defendió de los asaltantes.
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