La necropsia realizada a Javier Ordoñez, el abogado asesinado por policías en Bogotá, arrojó que tenía 9 fracturas en el cráneo, algunas, según el reporte, fueron producto de un arma contundente, así como de varias quemaduras en su cuerpo que serían producto de los electrochoques de los Taser, además del hígado reventado.
También se conoció que 2 polícias serían testigos claves en el caso ya que presenciaron todo lo que sucedió desde el traslado de Ordoñez al CAI de villa Luz y lo que sucedió en el interior. La Fiscalia ya tiene en su poder el vídeo que grabó uno de los uniformados.
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En el vídeo al parecer se evidenciaría lo que fue una “golpiza demencial” según los informes médicos. Por el momento las investigaciones están basadas en los testimonios de 12 testigos.
El ente investigador también tiene en su poder fotografías que demostrarían el estado en el que se encontraba el hombre de 46 años cuando salió del CAI, una de ellas con los fuertes golpes en su rostro.
Sobre el momento en que fue abordada la víctima por los policías se supo de parte de los investigadores que gracias a las cámaras de seguridad de la zona, se estableció que los patrulleros habían seguido a Javier y sus amigos hasta una cigarrería.
Los 2 policiales involucrados en el caso serían procesados por homicidio y otros 5 que ya fueron apartados de su cargo serían imputados por omisión.
Cabe recordar que por las evidencias, el caso perdió su fuero militar y pasó a manos de la Fiscalía, ya que el crimen nada tendría que ver con labores de servicio y más bien corresponde a una vieja rencilla entre los uniformados y la víctima, según se pudo conocer en las investigaciones adelantadas.
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