El presidente de Perú, Pedro Pablo Kuczynski, renunció a su cargo este miércoles 21 de marzo, un día antes de tener que enfrentarse a un juicio político por el escándalo de Odebrecht que ha golpeado también a Colombia, y en el que están implicadas las campañas del presidente Juan Manuel Santos y del uribista Óscar Iván Zuluaga
Kuczynski un político conservador, exbanquero de Wall Street de 79 años, quien asumió el poder en julio de 2016, iba a ser anfitrión de la cumbre de líderes de América en Lima el 13 y 14 de abril, durante la cual tenía planeado reunirse con el mandatario de Estados Unidos, Donald Trump.
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Su gobierno había entrado en una crisis profunda este martes luego de que la oposición fujimorista publicara unos vídeos que muestran a sus aliados políticos intentando comprar el voto de otros congresistas para evitar la destitución.
Legisladores de Fuerza Popular, el principal partido opositor de Perú, que es liderado por Keiko Fujimori (hija del indultado expresidente), denunciaron este martes que el gobierno compró votos para evitar que el Congreso destituyera en diciembre a Kuczynski y difundieron filmaciones que demostrarían esa supuesta maniobra ilegal.
En el video aparece el legislador Kenji Fujimori, hermano de Keiko, intentando convencer a un colega de apoyar a Kuczynski a cambio de obras públicas para su distrito. Los hermanos Fujimori están enfrentados políticamente. Kenji es disidente de la agrupación que lidera su hermana y aliado de Kuczynski. En diciembre, el apoyo de Kenji y otros fujimoristas permitió que el mandatario sobreviviera a la moción de destitución.
El presidente renunciante está en el ojo del huracán desde que en diciembre Odebrecht reveló que había pagado casi US$ 5 millones por asesorías a empresas ligadas a él mientras era ministro. Hasta entonces había negado todo lazo con la constructora.
Odebrecht admitió además que hizo aportes de campaña en 2006 y 2011 a los últimos cuatro ocupantes del sillón presidencial peruano, incluido Kuczynski, y a Keiko Fujimori, pero ellos lo niegan.
Un sondeo de la firma Ipsos reveló la semana pasada que el 58% de los peruanos apoyaba la destitución de Kuczynski, contra el 37% que prefería que siguiera hasta 2021.
Santismo y Uribismo también recibieron plata de Odebrecht
En Colombia el caso ha salpicado al santismo y al uribismo, luego de que la Fiscalía General confirmara que Odebrecht sí aportó dineros a las campañas electorales 2014 del presidente Juan Manuel Santos y de su rival, el uribista, Óscar Iván Zuluaga.
Según el informe de la Fiscalía en la campaña de Santos se realizaron dos transferencias de 500 mil dólares cada una, correspondientes a un contrato firmado el 2 de febrero de 2014 con la sociedad panameña Paddington, vinculada a la empresa colombiana Sancho BBDO, para hacer una encuesta de opinión «con el fin de lograr una aproximación con el Gobierno del presidente».
En cuanto a la campaña de Zuluaga, del opositor partido Centro Democrático, la Fiscalía confirmó que Odebrecht destinó 1,6 millones de dólares, a favor de la compañía Topsail Holding, con domicilio en Panamá.
Con los informes de la Fiscalía y sus propias investigaciones, será el Consejo Nacional Electoral el encargado de determinar si las campañas de Santos y Zuluaga violaron la ley colombiana en 2014 al recibir dinero de Odebrecht pues esta prohíbe recibir donaciones de empresas extranjeras.
Al respecto, la Misión de Observación Electoral ha advertido sobre el peligro de que quede en la impunidad la financiación ilegal de la campaña de 2014. Según la MOE, el próximo 15 de julio «caduca la acción sancionatoria sobre cualquiera de los posibles hechos relacionados con la financiación ilegal de Odebrecht en la campaña presidencial de 2014».
Con información: Revista Dinero
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