El portal periodístico La Silla Vacía publicó el pasado domingo, un extenso informe en el que denuncia que la Alcaldía de Armenia estaría participando en política, contrariando la ley que prohíbe que funcionarios públicos hagan campaña por cualquier candidato de elección popular.
Según el mencionado medio, en el último mes han estado circulando por las redes sociales quejas de que contratistas de la Alcaldía de Armenia le están haciendo campaña al antioqueño Julián Bedoya al Senado y al quindiano Luciano Grisales a la Cámara.
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La Silla vacía explica que Bedoya ha demostrado ser el un nuevo gamonal electoral paisa y tal vez no necesita los votos de los quindianos para asegurar su salto, pero se está valiendo de la relación estrecha de su fórmula en el Quindío, el representante Grisales, con el alcalde Carlos Mario Álvarez, para acrecentar su caudal electoral.
Se afirma en el artículo que el mandatario de la capital quindiana es amigo de Bedoya, gracias a la cercanía que ambos tienen con Luciano. Esa amistad habría llevado a que el 25 de enero, en un evento de presentación de la fórmula Bedoya-Grisales al que asistieron 1.200 personas, la primera dama del municipio, Luz Patricia Loaiza, haya estado sentada en la mesa principal al lado de los candidatos.
Sin embargo, esa no sería la única prueba de la cercanía política del triángulo Alcaldía – Bedoya – Grisales, pues desde enero empezaron a circular por redes sociales fotos de contratistas de secretarías como las de Planeación, Jurídica y de Desarrollo Económico, con camisetas de campaña de Grisales y o posando al lado de Bedoya.
En las fotos aparecen los contratistas de las Secretarías de Planeación y Jurídica Jessica Arenas, Luz Esther Duque, Miguel Ángel Mejía, Edgar Contreras y otros cuatro cuyos datos no dio a conocer el portal denunciante.
Luisa León, Subsecretaria de Desarrollo Económico que renunció a la Alcaldía el 9 de enero para adherir a la campaña de Grisales, le dijo a La Silla que es normal que contratistas participen en política porque el mayor empleador de Armenia es la Alcaldía, con alrededor de dos mil empleos.
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La Procuraduría tiene el caso en sus manos y está iniciando los trámites para reconocer qué contratistas están haciendo campaña y si son sancionables (depende de si esos manejan recursos o tienen cargos de decisión, o si solo son de apoyo a alguna gestión particular).
Además de los voluntarios, según le contaron a La Silla cuatro excontratistas, en las instalaciones de la Alcaldía los empleados estarían llenando planillas de datos personales de posibles votantes de la campaña de Luciano y no llenarlas les habría costado el contrato a varios en diciembre.
En cada dependencia hay contratistas que están encargados de cerciorarse de que sus compañeros entreguen las planillas, le den “me gusta” a las redes sociales de Grisales y de Bedoya, que compartan sus publicaciones y asistan a los eventos de campaña.
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