Brutal ataque a reconocida defensora de animales en Armenia al intentar rescatar perritos en condiciones deplorables.
La sociedad quindiana se encuentra consternada por el violento ataque del que fue víctima Ximena Padilla Suárez, una reconocida defensora de los derechos de los animales en Armenia. La mujer recibió disparos, una herida con arma blanca y un fuerte golpe en el rostro.
Los hechos ocurrieron en el barrio Génesis, donde la activista fue emboscada presuntamente por tres personas mientras intentaba rescatar a un perro que permanecía en un criadero clandestino.
Según denuncias difundidas en redes sociales, Ximena recibió dos impactos de bala con entrada y salida, una profunda herida con arma cortopunzante en una de sus piernas y un golpe severo en el rostro, luego de ser atacada por un hombre de aproximadamente 30 años, una mujer joven y un menor de edad. Las versiones indican que los agresores habrían planeado la emboscada con antelación.
A Ximena le tendieron una trampa
El ataque ocurrió cuando Padilla regresó al lugar donde días antes había logrado rescatar a tres perros de raza Pinscher en condiciones deplorables. Ximena al salir del sitio tumbó guadua y lona para poder rescatarlos. Sin embargo, un cuarto animal no pudo ser salvado en ese momento.
Tras recibir información de que el refugio improvisado había sido reconstruido, Ximena volvió al sitio, sin imaginar que se trataba de una trampa.
A la animalista la emboscaron al llegar al lugar. Durante el forcejeo, el hombre habría disparado el arma de fuego, mientras que el menor la agredió con un arma blanca. El golpe en el rostro, del cual aún no se tiene claridad sobre su origen, le dejó lesiones visibles. La activista fue trasladada de inmediato a un centro asistencial, donde permanece en recuperación.
Antes del ataque, Ximena habría expresado: “Para ustedes es plata, para mí son vidas”, en alusión a la comercialización de los perros, cuya raza (Pinscher Ratón de Praga) puede llegar a venderse por hasta 1.500.000 pesos en el mercado clandestino.
Según denuncias ciudadanas, los agresores consideran el criadero como parte de un «negocio familiar».
La agresión desató una ola de indignación en redes sociales entre los habitantes de la región, quienes exigen justicia y acompañamiento institucional para la activista. La ciudadanía que el intento de homicidio no quede impune y que se judicialice a los responsables.
Si q se haga justicia. Eso es deplorable, eso no puede quedar así es intento de homicidio.
Donde esta la justicia en colombia los autores deben estar presos sin ningún beneficio el intento era asesinar según lo planeado además hubo sevicia solo esperamos que un juez o fiscal no los dejen libres ya que demostraron ser un peligro para la sociedad.