Buscan prohibir inicio de clases en Colombia antes de las 7 de la mañana. Senado aprobó proyecto y ahora la propuesta la estudiará la Cámara.
El Senado de la República aprobó un proyecto de ley denominado «Estudio sin madrugón», el cual prohíbe el inicio de las jornadas escolares antes de las 7 de la mañana en instituciones educativas de preescolar, básica y media a nivel nacional.
La iniciativa, presentada por el senador Alejandro Chacón, busca mejorar el bienestar de los estudiantes al basarse en evidencia científica sobre los efectos negativos de la falta de sueño en los menores, tales como problemas de conducta y bajo rendimiento académico.
Durante el debate, se destacó la difícil situación de miles de estudiantes que deben comenzar sus actividades escolares a primera hora de la mañana, lo que a menudo implica desplazamientos desde las 5 de la mañana o incluso minutos antes.
El proyecto también plantea cambios en la duración de las clases, reduciendo las horas académicas de 60 a 45 minutos, lo que permitiría un mejor manejo del tiempo.
La iniciativa ahora pasará a la Cámara de Representantes para su revisión y, en caso de ser aprobado, será sancionado por el presidente.
Estudios que comprobarían que madrugar mucho puede afectar al estudiante
Existen diversos estudios científicos que han demostrado cómo las jornadas escolares demasiado tempranas afectan negativamente a los estudiantes, especialmente a los adolescentes.
Algunos hallazgos son los siguientes:
- Academia Estadounidense de Pediatría -AAP-: en 2014, recomendó que las clases no comiencen antes de las 8:30 a.m. para adolescentes. Estudios mostraron que los jóvenes necesitan entre 8 y 10 horas de sueño, y madrugar demasiado interfiere con ese requerimiento, afectando la memoria, la atención y el rendimiento académico.
- Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades -CDC-: encontraron que más del 70% de los adolescentes no duerme lo suficiente. Esto se relaciona con mayor riesgo de depresión, obesidad, accidentes de tránsito y bajo rendimiento escolar.
- Harvard Medical School: ha estudiado cómo la privación de sueño afecta el desarrollo cerebral de los adolescentes, incluyendo la toma de decisiones y el control emocional.
- University of Minnesota Study (2014): investigó escuelas que retrasaron sus horarios de entrada y halló mejoras significativas en asistencia, estado de ánimo, y calificaciones.
Sobre esto parece existir un consenso científico en el cual se sugiere que madrugar en exceso afecta física, emocional y cognitivamente a los estudiantes, especialmente durante la adolescencia, cuando el reloj biológico tiende a desplazarse hacia horarios más nocturnos.