El desvío del cauce del río Navarco en Salento, es estudiado e investigado por la Corporación Autónoma Regional del Quindío -CRQ- que intenta establecer quienes son los responsables de construir el jarillón que desvió el afluente y causó graves daños ambientales en la zona.
El desvío se hizo con maquinaria amarilla y sin ninguna consideración. El causante de la afectación deberá responder con sanciones administrativas, pues incluso este afluente es considerado como una de las fuentes hídricas para abastecer a municipios como Circasia.
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La autoridad ambiental explicó que la alteración del cauce, en cerca de 40 metros, no puede revertirse, pues esto podría generar en este momento mayores problemas de los que ya ha causado.
Indicaron también que este tipo de acciones generan aumento en el riesgo de desastres. Además es necesario hacer una evaluación a fondo para cuantificar los daños ambientales, especialmente en fauna.
Al parecer, la desviación estaría relacionada con actividades de minería y extracción de material de arrastre en la zona, por lo que se estudia si la acción fue liderada por grandes compañías que trabajan en Salento.
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